viernes, 11 de julio de 2008

DOBLE CERO: PERMISO PARA MATAR


¿Qué harías mi querida lectora, si de repente, un día, se instituye el doble cero, código jamesbondista con el que se habilita el permiso para matar, aunque más no sea por diez minutos? En mi lista hay varios blancos. Gente a la que a diario me gustaría asesinar con mis propias manos, por ineptas, molestas, ladinas, obsecuentes, engreídas, mezquinas, aprovechadoras, mentirosas, envidiosas, carroñeras......... Pero si sólo tuviera la posibilidad de llevarme una cabeza debajo del brazo, sé perfectamente a quien iría a buscar.

Si, si. nada original lo mío. Todos sabrían que, si el miserable apareciera culo para arriba en un baldío, la artífice habría sido yo.

y aunque la legislación me avale, no tendría gracia, no habría ningún misterio para develar. Esas tramas que me gustan de las películas....... ni ahí.

Nada de encantador.

Por ahí empiezo por la chupamedias compañera de trabajo, o por la inútil de la oficina de prensa que me obstruye el trabajo, o por ese pariente que hace años viene rompiendo las pelotas. como para despuntar el vicio.

y al marginal mentiroso Quasimodo que me quemó el 70% de las neuronas lo dejo para el final. o le pago a un asesino a sueldo que haga un trabajo más pulcro que el mio. porque con tanta subjetividad, uno no puede llevar adelante un crimen con altura.

1 comentario:

La distancia termina en el barranco dijo...

A mí no me alcanzan los 10 minutos ¿no puedo tener una prórroga de tiempo?

¿Ah, y es sólo para las "queridas lectoras" el asunto?

Saludos.